En mayo, Katty Hurtado Caamaño cumplió 5 años en la cárcel de Calama, desde que la justicia y el Estado decidieron condenarla a 20 años por el homicidio de Richard Aravena, su ex esposo y agresor. Katty se defendió de una agresión para no ser violada nuevamente, tras años de agresiones físicas y sexuales. 

La madrugada del 14 de mayo del 2018 Katty se encontraba con un profundo sentimiento de miedo y tensión ante una nueva agresión física e intento de violación de Aravena hacia ella. Los peritajes realizados acreditan el profundo temor de Katty a ser agredida nuevamente, sin embargo la Fiscalía no los consideró. 

En agosto de 2021, el Tribunal Oral en lo Penal de Calama condenó a Katty Hurtado por el delito de parricidio, en un juicio que no consideró los antecedentes de violencia intrafamiliar, ni siquiera el testimonio del hijo de ambos, Alex Aravena Hurtado, quien dio cuenta de la violencia que ejercía su padre contra su madre.

La Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres ha seguido este caso desde el año 2018, cuando conoció su historia. El 2022 se solicitó la nulidad del juicio ante la Corte Suprema y esta rechazó hacer un nuevo juicio, pese a reconocer las importantes fallas del proceso anterior. 

En ese momento, desde la Red Chilena, Lorena Astudillo señalaba: “el Estado chileno no puso a Katty a salvo. Cuando ella tuvo que defenderse, el Estado la criminaliza” y agregó que “todas las mujeres que ponen a salvo sus vidas deberían ser absueltas”.

Actualmente, de acuerdo a la Red Chilena, Katty Hurtado es la única mujer en Chile encarcelada por defenderse de su agresor. ¿Cuál es la legítima defensa de las mujeres en Chile?

A fines de 2021, Lorena Astudillo señaló que este proceso refleja el “cinismo puro de una sociedad y de una institucionalidad que en los discursos públicos condena la violencia hacia las mujeres, pero que a la hora de juzgar y conocer situaciones de violencia extrema hacia ellas se desdicen de todo lo que supuestamente deberían hacer. Cuando la reacción es poner a resguardo la vida y matar al agresor, son juzgadas”.

Se suma a la cadena de violencia que Katty fue violada por dos funcionarios de Gendarmería en octubre de 2018, mientras se encontraba en prisión preventiva en el penal de Calama, quienes hasta la fecha no han sido dados de baja. Desde ese momento, luego de ser trasladada del penal, Katty Hurtado se encuentra aislada, sin comunicación con otras internas ni posibilidad de ser transferida.

A nivel nacional, con la decisión de la Corte Suprema se agotaron las instancias del Poder Judicial. Por ello y ante la evidente transgresión a los derechos humanos de Katty Hurtado, la Clínica Jurídica de Interés Público de la Universidad de Chile interpuso una demanda contra el Estado ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). 

Por otra parte, de acuerdo a la Ley 18.050, un indulto permite solicitar la remisión, reducción o conmutación de una pena que haya sido impuesta mediante sentencia firme y ejecutoriada. Esto es una atribución del Presidente de la República. 
Por ello, desde la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres exigimos la libertad inmediata de Katty Hurtado.

Una mujer que se defiende de su agresor porque el Estado no la protege no debería estar ni un solo día en prisión. Katty lleva 5 años por poner a salvo su vida.