El pasado 9 de marzo, la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres intervino en la sesión especial de la Cámara de Diputadas/os para analizar la respuesta de los diversos órganos del Estado involucrados en la recepción de denuncias, investigación, reparación y sanción ante la violencia hacia mujeres.
Lorena Astudillo, feminista e integrante de la Coordinación Nacional de la Red Chilena, representó a la organización, y criticó fuertemente el abordaje y visión que tiene el Estado respecto al problema. En esta línea, realizó un cuestionamiento completo a cada una de las instituciones involucradas en el recorrido crítico que debe hacer una mujer cuando ya está viviendo violencia.
“Se piensa erróneamente en este país que denunciando se acaba la violencia hacia las mujeres, por lo tanto, son promovidas largamente aquellas políticas públicas como Whatsapp Mujer, Mascarilla 19, el Fono 1455. Finalmente, todas estas políticas públicas terminan en la denuncia. Esta denuncia, por tema territorial, principalmente se hace en Carabineros de Chile, pero ¿qué es lo que le responde la institución a las mujeres cuando van a denunciar o cuando hacen lo que el gobierno de Chile les pide?”, refirió Lorena.
En el estudio exploratorio “Denuncié violencia y #CarabinerosMeDijo”, realizado en 2020 por la Red Chilena, participaron 205 mujeres, de las cuales el 81% tuvo una percepción negativa de su intento de denuncia o denuncia efectiva en la institución, sintiéndose vulneradas, violentadas y/o maltratadas.
“La única obligación que tiene Carabineros de Chile cuando recibe una denuncia es tomar esa denuncia, no emitir juicios. Tampoco decidir si la toma o no, si corresponde o no. Por lo tanto, hoy día no están haciendo su trabajo”, sostuvo Lorena, haciendo énfasis en la necesaria refundación de la institución con un sentido social y no represivo.
Más tarde en la misma sesión, intervino el General Director de Carabineros, Ricardo Yáñez, señalando que la institución no tiene “las capacidades suficientes para atender esta demanda de la manera que quisiéramos”, refiriéndose a incapacidad para cumplir las medidas de protección y que no todos los funcionarios están preparados para manejar este tipo de situaciones.
Justicia y políticas públicas
En la instancia, la integrante de la Coordinación Nacional de la Red Chilena también criticó el ejercicio del Ministerio Público frente a la violencia hacia mujeres cuando se trata de ratificar las denuncias y evaluar si inicia o no un juicio, debido a que utiliza a las mujeres como medio de prueba. “Termina revictimizándolas y, por supuesto, no investigando aquello que tiene que investigar”.
Por su parte, el Poder Judicial, particularmente los jueces, en los procesos judiciales no utilizan los tratados internacionales que Chile ha firmado y ratificado, como la Convención Belém do Pará y la CEDAW, los cuales velan por los derechos humanos de las mujeres. Esto, indicó Lorena Astudillo, incide en que no existe una mirada global ni una perspectiva de género en lo que significa el problema de la violencia hacia las mujeres por parte de quienes tienen que juzgar.
A lo anterior se suma el desempeño del Ejecutivo, criticando al gobierno por usar la violencia hacia las mujeres como eslogan y la necesidad de que tome en serio el problema. Esto implicaría, entre otras cosas, que el Ministerio de la Mujer y Equidad de Género sea dirigido por mujeres con experiencia y conocimiento en el tema, además de que todos los ministerios trabajen en políticas públicas que consideren la equidad y la no discriminación hacia las mujeres.
Diputados y diputadas: basta de discursos y hagan su trabajo
Lorena Astudillo criticó también el rol de las y los diputados a partir de las intervenciones que habían realizado previamente en la sesión. “Ustedes no están para hacer estos discursos, ustedes están para hacer leyes, y para hacer buenas leyes. Sin embargo, sus intervenciones siguen siendo sobre aquello que las feministas por años hemos denunciado, por años hemos diagnosticado”, puntualizó Lorena.
Frente a esto, las leyes que trabajan desde el Congreso, según la integrante de la Red Chilena, son leyes parcializadas que no reconocen la violencia hacia mujeres como un problema global y tienen un enfoque punitivo porque sancionan la violencia cuando ya ocurrió. “Están dispuestos a castigar con la cantidad de años que sean, pero tenemos que esperar las mujeres ser violentadas para que estas leyes operen”.
En este sentido, Lorena Astudillo enfatizó en la necesidad de establecer leyes de promoción de una vida libre de violencia hacia las mujeres: “Por ejemplo, una educación no sexista, sentida demanda del movimiento feminista en 2018 y no pasó nada. Regular los medios de comunicación en la forma que emiten información sobre violencia hacia mujeres, terminar con los espectáculos que hacen con el problema. Una publicidad no sexista. Incentivar intervenciones sociales y territoriales respecto a violencia contra mujeres. No hay leyes de esto”, expresó.
Para finalizar, Lorena Astudillo apuntó a que el cambio necesario es cultural. “Nosotras promovemos la organización entre mujeres, pensamos que en todos los lugares tenemos que hacer y aportar. Pero ustedes, que están mandatados por la sociedad y que están en la institucionalidad, debieran terminar con los eslogan y discursos, y ponerse a hacer la pega con un sentido real y con una convicción de erradicar la violencia hacia las mujeres”, concluyó.