25 de noviembre, 2014

Declaración pública: 25 de noviembre día  internacional contra la violencia a las mujeres


En este 25 de noviembre, día establecido por el movimiento de mujeres y feminista internacional para denunciar la violencia hacia las mujeres a nivel mundial, saldremos una vez más a manifestarnos para evidenciar la extrema violencia que vivimos cotidianamente, en cada uno de los espacios que habitamos, en la casa, en la escuela, en la calle, en el trabajo, en la política, etc. Estas expresiones violentas, discriminatorias y humillantes no son habitualmente percibidas, puesto que se encuentran naturalizadas en la cultura machista, que no solo las promueve, también las estimula y ensalza a través de todos sus mensajes y prácticas.

Lamentablemente tenemos que identificar estas violencias en el cruento registro de femicidios cada año. Hasta la fecha, 56 mujeres han sido asesinadas, muchas de ellas habían denunciado a su agresor, lo que muestra la desprotección que vivimos y la ineficacia de los circuitos institucionales que tienen el mandato de garantizarnos la vida. Sin embargo, lo que más observamos, es negligencia de estos organismos, en la que habita igualmente la misoginia, el desprecio intrínseco a las mujeres.

Por su parte, la libertad para decidir sobre nuestros cuerpos, secuestrados y criminalizados bajo la inquisición de la iglesia católica y de un estado que prohíbe a las mujeres decidir si continuar o no con un embarazo, niega nuestras capacidades como sujetos autónomos.

Por último, en estos momentos en que se discute una reforma educacional, no aparecen en los debates referencias al sexismo imperante en la educación en Chile, tanto en sus contenidos curriculares y textos como en las prácticas en el aula. Allí, las mujeres somos invisibilizadas en nuestra producción de conocimiento o presentadas en roles de subordinación, dependencia, docilidad y pasividad; así mismo, la cultura escolar reprime y castiga expresiones diversas de las mujeres jóvenes en sus prácticas cotidianas.

En todas estas manifestaciones se refuerza y promueve una cultura machista y misógina, que antepone valores patriarcales por sobre nuestros cuerpos y vidas.

Ni una mujer menos, ni una muerta más!

Basta de criminalizar a las mujeres, aborto libre ahora!

Educación pública, laica y no sexista!