Los días viernes 26 y sábado 27 de abril se realizó la primera asamblea nacional del 2024. El encuentro contó con la participación de casi una decena de organizaciones feministas, quienes compartieron experiencias y relatos de mujeres activistas de distintos territorios. Estos intercambios fomentaron una reflexión profunda sobre los desafíos en la lucha contra la violencia hacia mujeres y niñas.
El encuentro congregó a activistas de distintas regiones: Colectivo Julieta Kirkwood de Arica, Segesex en representación de la Coordinadora Feminista y Disidente de Tarapacá, Memoria feminista Atacama en representación del Tejido de Mujeres Feministas de Atacama, Circulo de Profesoras Amanda Labarca, Fundación Ecolety de San Bernardo, Fundación EPES del Bosque y San Ramón, Arriba las que luchan de Talca, Coordinadora Feminista Ñuble de Chillán, Fundación Ciudadanas de Temuco, Corporación Mujeres Siglo XXI de Osorno, Coordinadora Feminista de Punta Arenas.
Primera Jornada: problemáticas regionales y desafíos en el feminismo
La primera jornada de la asamblea se enfocó en brindar un espacio para conversar sobre las problemáticas que enfrentan las mujeres en distintas regiones, así como en llevar a cabo discusiones grupales sobre los desafíos de acercar el feminismo a mujeres de todos los territorios.
Activistas del norte del país destacaron una preocupación alarmante en sus regiones: la desaparición de mujeres en diversas áreas, a menudo sin el apoyo adecuado de las autoridades para encontrarlas.
Muchas mujeres desaparecen en entornos desérticos sin una búsqueda activa, develando la trata de mujeres como un problema que se agudiza por la criminalización de la migración en Chile. Esto se suma al inquietante escenario de suicidios femicidas que se han visto incrementados en estas zonas.
En lugares como Copiapó, la contaminación proveniente de las industrias extractivistas también ha sido una preocupación significativa. Las colectivas han observado un aumento de enfermedades en sus poblaciones, entre ellas cáncer, especialmente en áreas donde se llevan a cabo actividades como la minería.
Este tipo de impacto ambiental también se ha manifestado en la zona central. En comunas como El Bosque, existe inquietud por la instalación de cementeras. En cuanto a las organizaciones feministas del sur, en la comuna de San Fabián, la construcción de una represa está generando debate sobre su impacto en el ecosistema y las comunidades
En relación a la labor activista en el sur del país, organizaciones feministas de Talca se han enfocado en brindar apoyo a los familiares de las víctimas de femicidios. Mientras, en la región de Ñuble se ha tratado de impulsar la educación no sexista en escuelas rurales, con el objetivo de capacitar a docentes y promover un ambiente inclusivo en las aulas.
En Temuco, grupos feministas ven con intranquilidad la falta de respuesta institucional ante la violencia política, además de alcaldes impunes ante denuncias de acoso. También miran con inquietud las condiciones precarias que existen en las cárceles, donde muchos recintos no cuentan ni siquiera con las condiciones higiénicas básicas.
Por otro lado, colectivas de Osorno, han visto la proliferación de campamentos agravada por la presencia del narcotráfico, lo que representa un desafío en el acercamiento a estos espacios. Estas organizaciones también se han dedicado al acompañamiento de familias afectadas por femicidios y a la concientización sobre este tema en sus territorios.
Respecto a los desafíos generales que enfrenta el movimiento feminista en la actualidad, se llegó a la conclusión de que existe una latente intranquilidad respecto a la disminución de la democracia, el extractivismo y la precarización de la vida. Además, se manifestó preocupación por la propagación de discursos anti-feministas, frente a los cuales se reconoció la necesidad de confrontarlos con asertividad.
Las colectivas plantearon que esperan avanzar como movimiento a través de la organización comunitaria, la comunicación y la educación no sexista, con enfoque en la educación sexual integral. Todo esto conectado también a la colaboración intergeneracional y las relaciones horizontales entre mujeres para fortalecer los espacios comunitarios.
Segunda Jornada: autodefensa y campaña “Cuidado el Machismo Mata“
Pasando a la segunda jornada de la asamblea nacional, esta se centró en la autodefensa y la falta de perspectiva de género del Poder Judicial chileno. Esto llevó a una reflexión profunda sobre la situación que vive Katty Hurtado, mujer que va a cumplir seis años de presidio tras defenderse de una agresión sexual y femicida.
En este contexto, se revisaron los requisitos actuales en los que se enmarca la legítima defensa en nuestro país. Se destacó que la Convención de Belém do Pará -ratificada por Chile en 1996- recomendó derogar la frase “maltrato habitual” en la ley penal a través del MESECVI. Esto debido a que incentiva a repetir agresiones contra mujeres y no toma en cuenta que se pueden sufrir lesiones graves con sólo un ataque. Esto refleja la falta de perspectiva de género por parte del Poder Judicial, lo que demanda una urgente actualización de las leyes.
En base a esto, se generó una discusión sobre la necesidad de revisar los requisitos legales establecidos para la legítima defensa, considerando el maltrato y el miedo constante que enfrentan muchas mujeres víctimas de violencia doméstica. En estos casos, resulta de suma importancia que las leyes tomen en cuenta las realidades de las mujeres y proporcionen un apoyo institucional adecuado.
En cuanto a estrategias de autodefensa, se compartieron experiencias de distintas organizaciones y comunidades, destacando la formación comunitaria y el apoyo entre mujeres como formas de empoderamiento y protección mutua. Además, se resaltó la importancia de estar alerta ante el riesgo que puede significar la utilización de armas como defensa, reconociendo sus peligros y los aspectos éticos que esto conlleva.
También se problematizó respecto a la seguridad pública y la necesidad de desvincular el concepto de autodefensa de ideologías militaristas y autoritarias que están en aumento actualmente en Chile. Es de suma relevancia que como movimiento feminista evitemos asociar el discurso de autodefensa con estas ideologías.
A partir de lo conversado en ambas jornadas de asamblea, se presentaron los lineamientos de la versión número diecisiete de la campaña “¡Cuidado! El machismo mata”, que será lanzada durante agosto de este 2024.